Associated Press
CHILE — "Chupete" y "Juanito" fueron botados en la calle por los dueños de su madre, y cuando todo hacía presumir que morirían de hambre, sed y frío, tuvieron la suerte de ser adoptados por "Matilda" una perra Chihuahua que estaba amamantando a un cachorro de un mes de vida.
La adopción se registró en el poblado de Tierra Amarilla, en Copiapó, 800 kilómetros al norte de Santiago, una zona en medio del desierto de Atacama, el más árido del mundo, informó el viernes el canal estatal Televisión Nacional.
El dueño de “Matilda”, Juan Rubio, relató a la televisora que “encontramos (el lunes) una caja con unos gatitos, nuevecitos, recién paridos, los dejaron toda la noche (a la intemperie) estaban heladitos”.
“Matilda” se hizo dueña de los gatos y no quiere que se los saquen: ¿Quién es más animal, el que tengo en la mano o el que botó los gatos”, preguntó Juan.
La veterinaria Rossana Zárate explicó que “Matilda” había criado un cachorro hace poco, “entonces tenía leche aún, y el instinto de cobijarlos generalmente se da, y en este caso en particular, aún más”.
“La Matilda les daba leche, luego los empezó a lavar, y empezaron a llorar..., pero los lavó otra vez”, contó Antonia Molina, nieta de Juan.
A verces, bueno casi siempre, los animales son mas humanos que la misma gente...
1 comentario:
pero que boniiiiiiiiita historia!!!! y que cierto es que los animales a veces son más humanos que las personas... que liiiiiiiindo!!!
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