Tengo hambre...

Tengo hambre, si tengo mucha hambre de amor, de cariño, de compañía y se me ha hace difícil saciarla.

Tengo hambre de sentir que mi corazón aun late, que mi espíritu y alma aun están en mi cuerpo, que tengo vida y no estoy muerto.

Pues cuando uno siente que le aman, no se porque, pero uno se siente en las nubes, se siente que puede realizar cualquier cosa, que puede mover un camión con los dientes.

Pero, tengo hambre de que me mires y me seduzcas con tu mirada, que me acaricies con esos ojos bellos y me devuelvas las ganas de vivir.

Tengo hambre de caricias, de besos, de que me muerdas los labios con ternura y amor. Que me digas al oído que me amas y que nunca me abandonaras, aunque no sea cierto.

Tengo hambre de que me abraces, de sentir tu cabeza en mi pecho, sentir tu cabello en mi cuerpo, tu calor y olor.

Tengo hambre de besos que me dejen sin respiración, de besos de amor, de besos interminables y sin prisas. Y de besos que recorran tu cuerpo, cada milímetro y centímetro de piel. 


Tengo hambre, mucha hambre… de ti.