ESPN compara algunos equipos que van a la Copa de Fútbol con la saga de Star Wars
BUENOS AIRES - El escritor y periodista inglés, David Winner, aseguró alguna vez que en la narrativa de la Copa del Mundo, Alemania es el villano. "Un Mundial sin Alemania sería como Star Wars sin Darth Vader", escribió.
Nosotros, los freaks de ESPNdeportes.com, admiramos su genialidad y nos alineamos en este ejercicio de comparaciones insólitas y elecciones arbitrarias. Dedicado a todos aquellos fanáticos de la saga de George Lucas, va nuestro elenco completo de personajes representados por naciones mundialistas.
LUKE SKYWALKER-ESPAÑA: Es la joven, nueva esperanza. Un rostro novedoso y refrescante. Lleno de empuje, con esa sensación adolescente de quien se cree invencible. De quien toma la victoria con normalidad. Posee un talento irrefutable, claro, aunque con algunos problemas aún para controlar su poder. Ya sufrió en el pasado: en películas anteriores le cortaron la mano. En la última, la más reciente, Estados Unidos le demostró que no todo está resuelto con ser un Maestro Jedi. Hoy carga esa lección, y eso lo hace solamente más peligroso.
LA PRINCESA LEIA-HOLANDA: Estética pura, movimientos finos, felinos, delicados. La selección que brilla desde su vestuario naranja (o su bikini dorada) es como su hermana de ficción: valiente, corajuda para ir al frente, conocedora de sus fortalezas, hábil ocultando sus debilidades. Tiene un toque femenino prácticamente irresistible para el que se regodea en mirarla. Sin embargo, y aunque cuenta con todas las condiciones para convertirse en protagonista grande, siempre termina cediendo el lugar a otros para que peleen cuando más importa.
YODA-BRASIL: Maestro de maestros, merecedor de todos nuestros respetos. Tiene un ritmo peculiar, pero sin que lo sepamos allí radica toda su sabiduría. A veces parece lento, hasta dormido. Y sin embargo, un par de movimientos le alcanzan para recordarnos con quién estamos tratando. Ágil, expediente lleno de talento. Nunca hay que subestimarlo, ni a él, ni a su historia. Por algo es quién es.
C3PO-FRANCIA: Desde el brillo vistoso de su armadura hasta su acento sofisticado, Francia parece encarnar sin concesiones aquel aristócrata pomposo y un poco estirado. Su fútbol de champagne y desdén encontró su mejor versión al lado de un hombre de un corazón gigante (podría haber sido Luke, pero fue Zidane), sin embargo hoy aparece un poco oxidado. Casi, diría, a punto de perder partes. Es un equipo duro, con movimientos bruscos, algo forzados, y una personalidad que se parece más a la de un mayordomo que a la de un líder autónomo.
R2D2-MÉXICO: ¿Cómo no? El viejo Arturito es pequeño, movedizo, inquietante. No importa lo que haga siempre cae simpático. Además tiene un idioma futbolístico absolutamente propio, el problema es que nadie lo entiende.
OBI WAN KENOBI-ARGENTINA: Casi un prócer en este universo. Peleó muchas veces. Incluso ganó algunas batallas. Su fortaleza general parecía inagotable, hasta que algo ocurrió. No está demasiado claro. En su último gran enfrentamiento, Darth Vader lo dejó llorando con la medalla de plata en el cuello. A partir de allí, fue una especie de fantasma, una sombra. Nadie duda de su potencial, pero hoy ya no parece encontrar una manera de plasmarlo de manera concreta. Tenía la Fuerza, y se dejó morir.
EL EMPERADOR-ITALIA: El poderoso eje del mal. El rey del apocalipsis. Su rigor y su disciplina atemorizan, claro que al mismo tiempo despiertan todo nuestro respeto. Se sabe que no será fácil vencerlo, y que entre sus armas legítimas podrá intercalar malas artes para lograr su objetivo. Hay quienes intentan imitar sus métodos pese a que, de alguna forma, sigue siendo único. Con un título más, acabaría definitivamente con la República. Y con el argumento pentacampeón de la Resistencia.
JABBA THE HUT-INGLATERRA: Un gigante rico, ambicioso, fuerte, roñoso y antipático. Dueño de los recursos más impactantes, puede someter al más pintado, aunque lo suyo no sea precisamente un jolgorio en los últimos años. Quizá se haya dejado estar, pensando que el hecho de ser un gigante le alcanzaría, y hoy su tamaño sea un impedimento más que le dificulta moverse.
HAN SOLO-PORTUGAL: ¿Buscan una mezcla de experiencia y juventud? ¿Buscan ese toque intrépido, temerario y picaresco? ¿Quieren a alguien joven, dispuesto a actuar en serio, a ponerse la pelea en el hombro, a tomar las riendas de cualquier batalla? Hay algo maravilloso que une a Portugal con el querible Han: ninguno de los dos tiene mucho que perder. Cuentan con las mejores herramientas y la voluntad para emplearlas. Cuentan con el ímpetu necesario y una experiencia construida en tiempos recientes que sirve para tomar decisiones en los momentos difíciles.
CHEWBACCA-URUGUAY: Su presencia es ancestral. Estuvo desde siempre, desde el comienzo, desde hace 100 años. Siempre fue valiente, luchador, fiel a su estilo guerrero. Siempre tuvo una fuerza particular, una garra propia, dirían algunos. Fiel a sus principios como pocos, contó con épocas de protagonismo indiscutido. En los últimos tiempos ha pasado a un segundo plano aunque todos tengan bien claro que posee todas las armas para pasar a ser de nuevo un personaje principal en cualquier película futbolística. Viejo y peludo, Uruguay. De vez en cuando pega un grito charrúa. Que la fuerza lo acompañe.
LOS EWOKS-NUEVA ZELANDA: Sigamos con la lógica que nos trajo hasta aquí, y digamos que un Mundial sin Nueva Zelanda sería como Star Wars sin los ewoks. Es decir: a nadie le importaría. No quiero ofender al fútbol neocelandés, pero seamos sinceros. Se trataría prácticamente de la misma película y no está realmente claro que llegue a haber demasiados reclamos por su ausencia. Bueno, quizá algún extremista fanático del fútbol oceánico. Si usted es uno de ellos, no se preocupe: siempre puede llevar su queja personalmente a George Lucas.