He aprendido en estos meses a disfrutar como nunca de la soledad y ha empezar a sentirme muy a gusto conmigo mismo.
Después de lo que he pasado, y del camino que me ha tocado caminar, tratando de huir de los recuerdos de la persona que le entregue mi corazón y lo que hizo fue destrozarlo con mentiras e infidelidad.
Ya no necesito huir de esos recuerdos y de esa ingrata, pues he superado mis conflictos internos y las heridas están sanadas.
Lo importante es lo que haga ahora: y no he de retroceder ni para coger impulso. Y no tendré miedo mas de lo pasado y menos del futuro que he de caminar.